Kohelet, el Eclesiastés nos enseña que hay tiempo para llorar y tiempo para reír. Afortunadamente tuvimos la celebración de Purim con un muy divertido festejo organizado por el grupo Aliyá. Como cada año reímos y nos alegramos con la lectura de Meguilat Esther, narrada por el Rabino Lieberson y bajo la organización de la doctora Anette Pier quien hizo una interesante similitud entre los enemigos de pueblo de Israel de antaño y los del día de hoy.